Sucumbiendo ante lo obvio

and one day, goodbye will be…

Hace unos días me di cuenta que una de las cosas que menos me gustan de un libro es cuando en alguna parte del relato se sentencia la ausencia de un personaje, advirtiendo que no va a aparecer más. Puede estar escrito de mil maneras distintas, pero el fraseo no se aleja mucho de «y esa fue la última vez que se vieron».

Odio ese ruido, y lo odio por lo artificial que es. Nosotros nunca podemos hacer eso en nuestras vidas, y sacando a la muerte del medio, es muy raro que sepamos que nunca más va a volver a pasar algo, o que nunca más vamos a ver a alguien; por eso para mí las despedidas apestan, me desconecto sin decir chau, los aeropuertos me hacen llorar a lagos, y a completos extraños les digo «hasta luego» cuando me voy. Cerrar puertas para no abrirlas más es algo que, en mi caso, me resulta más dificil de lo que le resulta a mucha gente. No me molesta dejar de ver gente o perder frecuencia con ellos, me molesta verbalizar que eso está sucediendo.

Acá hay un blog, que hace mucho está abandonado, así que vamos a dejarlo del todo. Por cualquier cosa me encuentran acá:

http://www.twitter.com/instantenea

y como me hago el que saco fotos, también estoy acá
http://www.facebook.com/instantenea 

merci.-

Tips de mejor amiga

Responder mensajes de texto no correspondidos por parte de uno con el emoticón carasonriente.

De esta manera ni mentimos, ni negamos, ni ignoramos.
 

Santiago

Ir caminando por calles nuevas para vos a la tarde, para que un hombre de dudosa higiene, con una mochila llena de tijeras de podar empiece a caminar a la par tuya, te empiece a contar que mañana vuelve a la cárcel, te pida plata para algo, y que al negarte se vaya como si nada, te hace sentir dueño de esa falsa sensación de seguridad cuando estás en modo turista, lejos de tu casa.

Prioridades

Apenas me mudé adonde vivo ahora, en la primer fiesta que hubo acá, se rompió una llave de gas, y desde ese entonces hay una pérdida chiquita. Ese entonces fue hace tres años, y recién hoy lo arreglaron.

Hace una semana se rompió el enchufecito del baño, lo cual hacía posible usar el secador de pelo. Fue la semana más larga de mi vida y fue prioridad uno conseguir a un electricista. Ya está todo bajo control.

compramos una cesta de bejuco en el puerto y el mono vino adentro!

Tenía ocho y estaban haciendo reformas en mi casa vieja, y para eso trajeron muchas maderas que compraron lejos, para hacer algo en el techo. Pero las maderas eran muchas, venían apiladas y viajaron de lejos con un bicho, que era grande y raro, como un escarabajo pero más raro. En casa lo agarraron, lo metieron adentro de un vaso y se fueron corriendo a llevarlo al museo, ahi le dijeron «uy, este no lo tenemos» y les dieron las gracias a mi familia y se pusieron contentos, y pusieron al bicho en esa parte del museo de ciencias naturales donde están todos los bichos con alfileres en la espalda, para que no se escapen. Después de que me contaron esto fui muchas veces al museo, siempre esperando reconocer a ese bicho, pero como nunca lo había visto siempre buscaba al que parecía más nuevito, o el que tenía el alfiler menos oxidado.

Nunca supe si esto fue verdad, si me decían que una rata me dejaba plata por cada diente que se me caía, es probable que esto sea otra mentira, para que vaya al museo entusiasmado.

tabasco, nutella y alcohol

Por segunda vez mi cuerpo me da un aviso de que si sigo así termino con gastritis. Me dieron una lista chiquita de cosas que puedo comer, y una lista larga de las que no – fritos, golosinas, cafe, picantes, alcohol, salsas y todas las otras cosas que comí al menos una vez esta semana.

Ya van tres días de la dieta que me prohibe pisar Starbucks y Burger, y el síndrome de abstinencia me está matando

derretido

Después de muchísimo tiempo, los caramelos halls se convierten en juguito pegajoso. Mi morral es prueba viviente de ello.

Como incomodar a una profesora de inglés que no te cae muy bien en un paso

1. Preguntarle cuál es el significado de la expresión Hoochie Mamma

(esto)

amo el otoño

En mi cuadra las hojas caídas crujen demasiado, y son muchas.

ropa sucia

Me quedé sin ropa interior limpia y me fui a comprar más.
Y cuando se ensucie esta ropa debería comprar más, o buscar alguna otra solución, pero no se me ocurre nada…

Sumun

Escenario: supermercado, haciendo mis compras del mes, donde la mitad de lo que llevo es básicamente queso y cerveza – como no se nada de vinos, trato de probar distintas variedades de estas dos cosas para compensar.

Paso por la góndola de las cervezas, agarro un pack de seis nacionales y dos coronas chiquitas, repaso la góndola y sigo… me freno de golpe, vuelvo sobre mis pasos y vuelvo a leer lo que me llamó la atención: una lata verde de cerveza danesa, que abajo, con letra blanca decía en inglés «probablemente, la mejor cerveza del mundo«.

Obviamente, agarré dos y las llevé conmigo. Todavía no abrí ninguna, por miedo a que despues de probarlas nada más me parezca delicioso.

susto

Escenario: un consultorio, yo con dos doctoras – o aspirantes a serlo -, de más o menos mi edad, revisandome de arriba a abajo, preguntándome un montón de cosas. Una de ellas me mira y me dice:

– Y vos sos flogler…. gogler… blogler… no?

Si antes de eso la otra chica no me hubiera dicho…

– Tus síntomas ameritan un análisis de HIV, ya.

… el primer comentario me hubiera causado mucha gracia. En cambio, pasé un fin de semana espantoso, esperando a que el lunes aparezca un NO REACTIVO en los resultados de los análisis.

(no se si doctoras está bien dicho)

Grolsch

nay: No me digas que vas a ponerte a tomar esa cerveza ahora, estamos adelante de todo en el colectivo
andee: soy una persona con clase, y creo que a nadie le molestaría que disfrute de esta deliciosa cerveza holandesa…

Acto seguido abro la lata que al parecer estaba agitada y me moja el pantalón, creo que nadie estaba viendo.

confessions on a blog post

Tarde pero seguro, cumplo con la obligación que me impuso maximus, enumerando seis confesiones. No se la paso a nadie porque no me gustan estas cadenitas, pero no podía negar un gesto de este muchacho…

1. Le hablo a mi perro cuando hay gente delante. Le pregunto cosas o le hago comentarios serios cuando estamos solos.
2. Hasta hace poco pensaba que salmonella era un plato preparado con pescado.
3. Me pico la nariz continuamente, y ahora pongo mi reciente operación como excusa.
4. Grito fuerte cuando voy caminando cerca de una vía y justo pasa un tren ruidoso.
5. No puedo evitar decir salud cuando alguien cerca mío estornuda. Y si no lo digo es porque me contuve y lo dije mentalmente.
6. Me da mucho miedo tener fiebre, porque cuando me agarra, la mayoría de las veces tengo sueños horribles.

el chusma

Me mata la curiosidad cada vez que mi vista se cruza con uno o mas containers. Pagaria lo que sea por saber que demonios esconde cada uno de ellos…

detalle

Notaron que bien pero bien al fondo de este paginahay una carita sonriente?
(este posteo es relleno, estoy probando redactar desde otro Lugar que no sea una compu)